Tipos de Aislamiento para Ventanas; ¿Sabías que de poco o nada sirve encender cualquier sistema de climatización si no tienes un buen aislamiento de las ventanas? Esto se debe a que ya no cumplen una de sus principales funciones, que es la de retener el calor, o el frescor.

En otras palabras, puedes poner los radiadores a tope, o el aire acondicionado a las temperaturas más extremas, y no servirá de mucho, ya que las ventanas están dejando escapar todo el resultado del esfuerzo de estos aparatos.

Si quieres ahorrar en tus facturas de luz y gas, nuestro consejo es que apuestes por esta medida eficiente.

La regla de oro es evitar el despilfarro. Quédate con nosotros y aprende más sobre el tema en este artículo de Estudiar Energías Renovables Online.

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Tipos de Aislamiento para Ventanas. Ventajas para la Eficiencia Energética

¿Por qué es Importante el Aislamiento Térmico de las Ventanas?

Para cualquiera que pague las facturas de su casa, no es una novedad que el aumento de los precios de la energía es una realidad en todo el mundo, y en España no es diferente.

Por lo tanto, resulta inevitable pensar en formas de evitar el despilfarro y ahorrar en las facturas de electricidad y gas natural. Ya sea para mantener la calefacción de tu casa durante más tiempo en los días fríos, o para asegurarte de que se mantiene fresca en los momentos en los que el calor ya se hace notar, el razonamiento es el mismo: hay que encontrar maneras de hacer que tu casa sea más eficiente.

¿Y sabes una de las reglas básicas para lograr este objetivo? Sí, exactamente: el aislamiento de las ventanas, que es el tema de este artículo.

Tipos de Aislamiento para Ventanas

Hay muchas maneras de aislar las ventanas, algunas básicas y otras más sofisticadas, una elección que tiene un impacto directo en los niveles de eficiencia.

Puedes, por ejemplo, hacer que el aislamiento sea sencillo y económico, sin mayor ayuda profesional, o apostar por medidas que garanticen un mayor éxito en la lucha contra el despilfarro. En cualquier caso, en cualquier situación, las cortinas y los estores son siempre grandes complementos, y una ayuda extra para asegurar que se retiene más calor o frescor en el interior.

Entre los tipos más económicos de aislamiento de ventanas, encontramos los burletes, las cintas de goma adhesiva, el relleno profesional (con pasta de poliuretano o masilla) y los rollos (también conocidos como salchichas). Para obtener resultados más eficientes, que también suponen una mayor inversión, disponemos de ventanas de doble acristalamiento. Si estás construyendo o renovando una casa antigua, deberías tener en cuenta esta solución.

Burletes

Los burletes prometen ser una solución económica y bastante sencilla de aplicar, pero son menos duraderos que otros tipos de cintas de calafateo.

El aislamiento de las ventanas con burletes funciona mediante tiras autoadhesivas, que se pueden adquirir fácilmente en tiendas especializadas. Las cintas pueden aplicarse a cualquier tamaño de ventana, ya que se cortan a medida.

Basta con medir las ventanas, cortar las cintas a la medida y pegarlas en todos los bordes, donde, como sabemos, el aire pasa más fácilmente.

Son eficaces para retener la temperatura exterior y evitar que el aire del exterior entre en tu casa, además de ser una solución que no compromete el aspecto estético de tus ventanas. Sin embargo, son difíciles de eliminar y, en caso de necesidad, es probable que dejen marcas y restos de pegamento.

Cintas adhesivas de caucho

En términos de facilidad de aplicación y precio, son prácticamente idénticos a los burletes. La diferencia radica en el material con el que se fabrican, el caucho, que garantiza unos niveles de eficiencia ligeramente superiores.

La desventaja de este tipo de aislamiento es el aspecto estético: las cintas de goma son más visibles.

Relleno profesional

Otro de los tipos de aislamiento para ventanas, que es bastante económico, está indicado para resolver situaciones más específicas, como cuando las ventanas presentan grietas. La masilla profesional, hecha de masilla o poliuretano, proporciona un aislamiento total en las zonas en las que se aplica, pero permanece visible. Probablemente, tendrás que resolver este problema estético pintando.

¿Cómo solicitarlo? Con una pistola pulverizadora que puedes encontrar fácilmente en tiendas especializadas.

Rollos aislantes

Los rollos aislantes son grandes aliados contra la pérdida de calor o de frío. Son supereconómicos y fáciles de encontrar para su compra, no necesitan procesos de instalación o aplicación, y garantizan ser un plus en la lucha contra el despilfarro energético.

¿Cuántos de nosotros, con la calefacción encendida y la habitación caliente, pasamos por una puerta o ventana y sentimos que entra aire frío? Ahí es exactamente donde los rollos hacen su magia: basta con colocarlos en la parte inferior, cubriendo toda la longitud de la ventana (o puerta), y ya está. Para minimizar su efecto en la estética de la habitación, puedes optar por cubrirlos con una tela decorativa.

Ventanas de doble acristalamiento

Para los que realmente quieren un aislamiento más eficiente, que sea lo más eficaz posible, la solución debe ser el doble acristalamiento, una medida que puede ser aún más eficiente si se opta por instalar ventanas dobles, con doble vidrio en cada una de ellas. En otras palabras, crearás no una ni dos, sino cuatro barreras contra la pérdida de calor o refrigeración del interior de la casa.

Es una apuesta ganadora, dada la eficiencia que garantiza, pero no es barata. Es una buena idea pensar en esta solución cuando se planea una reforma importante o se construye una casa.

Tipos de Aislamiento para Ventanas - Eficiencia Energética

¿Cómo es el Aislamiento de las Ventanas, Según el Material?

Ya hemos visto los tipos de aislamiento para ventanas. En cuanto a la apariencia, todo depende del sistema de sellado que utilices para aislar los bordes: algunos son más visibles, otros más discretos. Si eliges un servicio profesional, podrás obtener las mejores sugerencias de sistemas y materiales. Si vas a hacerlo tú mismo, no hay nada como pedir consejo a una tienda especializada.

Aislamiento para ventanas correderas

Por lo general, las ventanas correderas vienen con sistemas específicos de sellado del aire que son muy difíciles de sustituir, como las bandas de cepillo. Por este motivo, es aconsejable pedir ayuda profesional y no dedicarse al bricolaje.

Cómo aislar las ventanas de madera

La madera, por muy buena que sea, siempre puede verse afectada con el paso de los años, ya sea por las condiciones a las que ha estado expuesta o por la invasión de insectos. Por este motivo, siempre es conveniente comprobar cuidadosamente el estado de las ventanas antes de optar por cualquier tipo de aislamiento.

Probablemente, tendrás que reparar algunos de los puntos más débiles, como las grietas, antes de proceder a la idea de reforzar el aislamiento de estos tipos de ventanas. En el caso de las grietas, hay que utilizar una masilla profesional (yeso o espuma de poliuretano) y esperar a que se hinche y se seque por completo. A continuación, es probable que tengas que pintar o barnizar la madera, y sólo entonces calafatearla con un simple adhesivo o tiras de goma. El resultado estético depende siempre de la forma en que se realice el trabajo y del material de sellado elegido; ya hemos visto, por ejemplo, que el caucho es más visible.

Aislamiento para ventanas de aluminio

Los burletes de PVC son una buena solución para las ventanas de aluminio. Además de ser menos visibles que las bandas de goma, son muy sencillos de aplicar.

Si tienes ventanas correderas, puedes elegir los listones que no requieren pegamento ni tornillos: se insertan directamente en el marco.

Ventajas del Aislamiento de Ventanas para la Eficiencia Energética

Ya hemos visto los tipos de aislamiento para ventanas, pero ¿cuáles son sus ventajas para la eficiencia energética?

Hacer que tus ventanas sean más eficientes mediante medidas de aislamiento térmico supone al menos 9 ventajas que no deberías dejar de aprovechar, tanto para ahorrar en tus facturas de energía como para el planeta.

  • Más confort térmico en los interiores.
  • Menos situaciones de infiltración de aire y agua.
  • Mejor calidad de vida.
  • Menos desperdicio de energía.
  • Menos consumo de energía.
  • Reducción de las facturas de electricidad y/o gas natural.
  • Reducción de las emisiones de dióxido de carbono: fundamental para generar electricidad.
  • Menos dependencia energética.
  • Mayor eficiencia energética de los inmuebles.

Si quieres reducir el consumo de energía en tu casa y, al mismo tiempo, contribuir a la disminución de su generación, debes considerar opciones que hagan que tu hogar sea eficiente.

Esto incluye el aislamiento de las ventanas, por supuesto, pero también muchas otras medidas que puedes y debes tener en cuenta, como consumir energía 100% verde e invertir en sistemas de energía renovable, como los paneles solares.

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