¿Cuáles Son las Bombillas que Menos Consumen?

Las bombillas de bajo consumo son dispositivos eléctricos que tienen una buena durabilidad y eficiencia energética. Esto significa que consumen menos energía para iluminar que las bombillas más antiguas, como las incandescentes y las halógenas.

Por ejemplo, la bombilla fluorescente se considera de bajo consumo. Este modelo consiste en un tubo de vidrio recubierto de un material a base de fósforo. En su interior hay gases inertes a baja presión que se ionizan cuando se aplica una corriente eléctrica. Se genera entonces una luz visible.

Cabe mencionar que existen dos tipos de bombillas fluorescentes: las tubulares y las compactas. El primero consiste en un dispositivo de forma cilíndrica, ovalada o redonda. Puede proporcionar una iluminación intensa en los ambientes, así como iluminar grandes áreas de manera más uniforme.

Por este motivo, la bombilla fluorescente tubular es ideal para entornos en los que se realizan actividades que requieren mucha atención. Por ejemplo: pasillos, cobertizos, garajes, cocinas y oficinas.

Las bombillas fluorescentes compactas, también conocidas como CFL, tienen una forma similar a las bombillas incandescentes. Suele utilizarse para iluminar hogares y comercios y tiene una función decorativa, ya que es de pequeño tamaño en comparación con una bombilla tubular.

Seguimos explicando cuáles son las bombillas que menos consumen, le toca el turno a las LED.

Las bombillas LED (Light Emitting Diodes) son tecnologías avanzadas y extremadamente eficientes, que no utilizan un reactor ni tienen materiales pesados en su composición, lo que las hace ecológicamente correctas.

Además, no emiten rayos infrarrojos ni ultravioleta, lo que proporciona mucha más seguridad a quienes las emplean.
Cabe destacar que existen varios tipos de bombillas LED, por lo que el consumidor puede adquirir la que mejor se adapte a sus necesidades.

En cuanto a los tipos de bombillas LED, enumeramos los principales:

• Tipo dicroico spot: su luz es focalizada y se suele usar en lámparas de tipo spot.
• Globo: su modelo es similar al de las extintas bombillas incandescentes.
• Tubulares: son cilíndricos y largos. Por lo tanto, son ideales para lugares grandes que necesitan una iluminación potente.
• Bola pequeña: similar a una bombilla, pero de menor tamaño.
• Maíz: como su nombre indica, su modelo se asemeja a la forma de una mazorca. Tiene una base de tornillo y se utiliza en la iluminación común.
• Espiral: su formato es en espiral y puede usarse en varias iluminaciones.

En cuanto a los colores, la bombilla LED también tiene varios tipos: pueden acercarse más a una luz cálida o a una luz fría. Además del modelo tradicional (blanco), también hay bombillas LED amarillas, verdes, azules y rojas, entre otras. Por esta misma razón, se usa para los adornos navideños y para otros fines decorativos.

Por último, las bombillas LED también se pueden encontrar en diferentes potencias. Sin embargo, debes saber que cuantos más lúmenes y menos vatios tenga una lámpara, independientemente de si es LED o no, menos energía consumirá.

Llegamos a la gran pregunta, ¿cuáles son las bombillas que menos consumen?

Tanto las bombillas LED como las de bajo consumo son muy eficientes. Incluso es posible clasificar la bombilla LED como una bombilla de ahorro de energía. Al fin y al cabo, ambas son sostenibles y, en comparación con las incandescentes, rinden mucho más.

Por lo tanto, aunque el coste de las bombillas fluorescentes y LED es más elevado en comparación con otras bombillas, su rentabilidad es mayor debido a su larga vida útil.

De hecho, la bombilla LED puede durar al menos 25 veces más que las bombillas incandescentes. Es decir, su vida útil es de entre 20 y 45 mil horas de uso.

Las bombillas fluorescentes, en cambio, duran entre 6 y 15 mil horas, lo que significa que su vida útil es hasta 6 veces mayor que la de una bombilla incandescente.

Además, ambas bombillas son de alta eficiencia energética. Las bombillas fluorescentes ahorran hasta un 75% de electricidad en comparación con las bombillas incandescentes. El LED, en la misma comparación, ahorra alrededor del 80%.

En este sentido, estos modelos de bombillas contribuyen en gran medida al medio ambiente. Al ser eficientes, consumen menos electricidad y, en consecuencia, contribuyen a reducir la emisión de gases de efecto invernadero.

Pero aún hay más ventajas. A diferencia de las incandescentes, que pierden mucha energía por el calor, estas bombillas convierten la mayor parte de la energía eléctrica en luz. En otras palabras, la conversión en energía térmica es mínima.

Además, las lámparas LED no contaminan el medio ambiente, ya que no contienen sustancias tóxicas en su interior.

Los fluorescentes, en cambio, a pesar de contener mercurio en pequeñas cantidades, requieren una mayor atención tanto en su uso como en su eliminación. En otras palabras, debes deshacerte de él en una tienda especializada en lugar de tirarlo.

De hecho, las bombillas LED pueden ser más caras, pero no requieren tantos cuidados y duran mucho más.

Recordemos que las bombillas fluorescentes también son excelentes opciones para quienes quieren ahorrar en la factura de la luz, por lo que se consideran de bajo consumo.

Por ello, las bombillas de bajo consumo y las LED son igualmente importantes, sostenibles y de consumo bajo. Puedes elegir la que mejor se adapte a sus necesidades.

Independientemente de los tipos de bombillas que elijas, Estudiar Energías Renovables Online te recomienda que siempre que puedas elijas la luz natural. Es bueno para tu cuerpo, para tu ahorro doméstico y, por supuesto, para la naturaleza.